Balanced Scorecard: Se implementó y nada cambió
Un Balanced Scorecard no lo va a utilizar una organización tan sólo como tablero de indicadores. Es una pérdida de tiempo y dinero. Es igual como si tuvieras un Mercedes Benz 2012 nada más para usarlo el domingo para dar nada más una vuelta a la Plaza y en seguida lo guardas hasta el domingo siguiente.
Esta es la triste realidad en muchas organizaciones: Únicamente una vez al mes estudian el control de indicadores.
En ocasiones, una vez que es puesto en marcha el modelo, todo se continúa dirigiendo igual que antes. O sea que no pasa nada sino que todo se centra alrededor de los indicadores. ¡Ah! Y los colores que llaman la atención: rojo, amarillo, verde?
Otro uso incorrecto del Balanced Scorecard se presenta cuando no se evalúan los avances estratégicos tan solo se consideran los resultados operativos (ventas, gastos, etc.). Y durante las reuniones de gerentes del 15 de cada mes, el BSC no está presente el 99% de las veces; no lo lleva ni el Director General ni ninguno de los participantes y las reuniones continúan igual que antes.
Todavía actualmente existen organizaciones que no saben que el Scorecard como un proceso Estático y no Dinámico.
Muchos dejan los elementos inamovibles, como grabados en piedra: objetivos, metas e iniciativas, causa y efecto, indicadores, no conciben que se trata de un proceso dinámico y de constante aprendizaje mediante un Diàlogo Organizacional tendiente a conseguir la visión de la organización.