Escritor en busca de editorial
El oficio de escritor supone únicamente escribir con la mejor calidad posible. Sin embargo ser un escritor conocido, aparte de escribir con calidad, requiere disponer de una habilidad destacada para colocar los escritos así como la imprescindible calidad literaria… incluso sin esta cualidad capital también se publica
El título de este artículo es una inspiración del título de la inmortal obra dramática de Pirandello: Autor en busca de personaje. Y es que resulta que para cualquier oscuro escritor, como es mi caso, "colocar" una obra se convierte en una tarea mucho más ardua que escribir la obra. Independientemente de la calidad de la obra en sí.
Este estado de cosas ofusca a todo aquel que se dice escritor y escribe. Pero a quien más le afecta, indudablemente, es al escritor vocacional: al que cultiva las letras, al candidato a escritor serio, al escritor pura sangre, al "piel roja" de la literatura. Sin embargo, a ver que remedio, se aguanta.
Pero, si el escritor es escritor tal circunstancia sumamente adversa para sus intereses las tomará como gajes de su oficio y continuará ahora con más rabia y sangre escribiendo otras obras: novela, cuento, teatro, ensayo, diario, etcétera.
Un escritor que tiene la intuición de escritor casi debería agradecerle a las editoriales en general que se prostituyan al resultado de sus ventas (independientemente de la calidad de la obra literaria) o al monopolio editorial de los autores conocidos.
Autores, que en el 90% de los casos son algo más que escritores "piel roja": personajes de la esfera mediática o escritores que escriben novelas, cuentos u obras dramáticas que nada aportan al legitimo paso de caracol de la gran literatura. Son "escritores" después de la literatura con mayúsculas.
Yo actualmente estoy en busca de un buen editor. Pero como todavía no lo he encontrado sigo siendo un escritor en busca de editor.